Molly Sandén - Så Vill Stjärnorna

Este sábado se elegió la canción que representará a España en el Festival de Eurovisión. Estuve siguiendo con interés la final, tragándome un sinfín de canciones a cada cual peor, pero, no sé por qué, desde siempre, me ha interesado mucho el Festival de Eurovisión. La inmensa mayoría de las canciones son malas, pero disfruto mucho siguiendo algunas preselecciones y viendo las semifinales y la final. A veces pienso que mi afán por los idiomas tiene que ver con el Festival que veía cuando era pequeña, en el que cada país cantaba en su idioma y yo podía aprender palabras en turco o en yugoslavo.

Bueno, todo este rollo tiene que ver con la canción que he elegido. Todos los eurofans saben que la preselección más interesante de Europa por nivel de profesionalidad, interés y trabajo bien hecho es la de Suecia (se llama Melodifestivalen). Habitualmente, la canción típida sueca tiene reminiscencias de ABBA (el schlager es el género al que pertenecen estas canciones). Sin embargo, a veces, viendo el Melodifestivalen descubrimos (o al menos yo descubro), preciosas baladas como la que he elegido hoy.

La cantante es una jovencita a la que conocí en el Eurojunior hace años. Destaca por encima de los demás, además de por su calidad vocal, por el estilo, digamos más maduro, de la canción. Lo que quedó de aquella vez fue una sensación de que a esa niña habría que seguirla en el futuro. La canción que este año lleva al "Melodi" es una balada que a mí me emociona cada vez que la escucho. Ahora mismo podría decir que es mi canción preferida del momento. Por ahora está en la final, a ver qué tal lo hace allí. Ojalá la pueda ver en Moscú.